SALIDA POLÍTICA O DIVISIÓN

AL PERREDISMO NACIONAL:
A LA CIUDADANÍA PATRIÓTICA Y DEMOCRÁTICA:

La elección del 16 de marzo para renovar instancias nacionales y estatales del PRD fue viciada por la disputa desbordada entre dos bloques de fuerzas y, 7 días después el proceso post-electoral está entrampado, configurando el riesgo más serio que ha tenido la unidad y viabilidad del principal referente político electoral de la izquierda mexicana.
-I-
Para sacar al PRD de la barranca, lo primero que se requiere es autocrítica de todas las fuerzas e instancias del partido.
Hay que salir de la dinámica de la descalificación y recriminación a los demás, asumir también la parte de responsabilidad que nos toca, y sobre todo, poner en primer plano la necesidad urgente de que todo el potencial perredista, se despliegue para fortalecer la lucha en defensa de los energéticos y por el derrumbe de la república simulada.
La dinámica de la descalificación y recriminación, convierte en antagónicas contradicciones en el seno del campo patriótico y democrático, que siendo importantes y no hay que soslayarlas, son secundarias en relación con la disputa contra las fuerzas neoliberales, más aún cuando estamos en la fase culminante del proceso de neocolonización de México, y de un retroceso autoritario que ya adquiere rasgos de nazipanismo.
Nosotros, la Red-IR, vimos venir la polarización de la disputa entre el bloque que apoyó a Jesús Ortega y el que apoyó a Encinas. Uno de los objetivos de nuestra campaña fue despolarizar. Asumimos que no fuimos capaces de lograrlo y, por ello, somos corresponsables de la situación de bancarrota que padece el modelo de partido perredista.
La Red-IR no fue capaz de evitar que la mayoría perredista inconforme y cuestionadora, se dispersara en dos segmentos: uno que considera que el problema principal es superar el papel de aparato de acompañamiento del PRD hacia el liderazgo en turno y su burbuja y que dio su apoyo a Ortega; otro que consideró que Nueva Izquierda es la principal responsable de la dinámica y de las decisiones burocráticas que predominan en el PRD, y canalizó su apoyo a Encinas.
La Red-IR no fuimos capaces, pues, de ganar al perredismo popular e inconforme con la dinámica y los métodos burocráticos que predominan en el partido, para que asumiera que el fortalecimiento de la tendencia de izquierda patriótica y revolucionaria, es el factor principal para superar la crisis de identidad ideológica del PRD, para ponerlo en movimiento y superar su alejamiento de la lucha social y política de masas, así como para reactivar la discusión y formación política que permita superar la empobrecida vida interna y el atraso a que se condena al perredismo.
En otras palabras, no fuimos capaces de que el perredismo inconforme y popular asumiera la principal lección que la crisis del PRD nos da: sin hegemonía de izquierda y revolucionaria, la lucha electoral e institucional conduce al movimiento de liberación patriótica y democrática de México, por un lado, a la impotencia para enfrentar fraudes y usurpaciones con la lucha de masas generalizada; por el otro, a la conformación y predominio de capas burocráticas que priorizan sus intereses y se pierden en disputas interminables de poder.
-II-
¿Qué propone la Red-IR para destrabar el atolladero a que nos condujo la elección interna?
Primero: ratificamos que la judicialización del proceso no es salida. Decidir ir al TRIFE para que resuelva qué bloque se queda con la presidencia y el registro, es el camino de la división del PRD.
Segundo: la salida es la del acuerdo político, que parta de asumir que el proceso está viciado y entrampado.
Tercero: que no se trata solamente de nombrar una dirección interina para reorganizar nuevas elecciones, sino de asumir que el modelo de partido está agotado… y que estas deben ser las últimas elecciones del PRD actual.
Cuarto: que por lo tanto, hay que definir una ruta para salir de la crisis institucional actual y cambiar el modelo de partido, por lo que se hace indispensable realizar a la mayor brevedad un cónclave con los principales actores: Andrés Manuel López Obrador, el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, los gobernadores y representantes de las principales fuerzas del partido, que discuta la situación y delinee un acuerdo y ruta política que se presente al Consejo Nacional, próximo a reunirse.
Quinto: la Red-IR insistirá que la salida al agotamiento del modelo de partido está en ir a la conformación de un Partido Frente Electoral Único del campo patriótico y democrático, semejante al Frente Amplio de Uruguay y/o el Partido Democrático Italiano.
Sexto: la Red-IR convoca a todas y todos los perredistas a salir del conflicto electoral interno y pasar inmediatamente a organizarse como brigadas en defensa de los energéticos y por el derrumbe de la república simulada.
México, D.F. a 24 de marzo de 2008
¡Por la izquierda que México necesita!
JOSÉ CAMILO VALENZUELA

Correo: laizquierdaconcamilo@gmail.com
Blog: http://camilovalenzuelafierro.blogspot.com/
Sitio: www.redirmexico.net
Celular: 55 2139 9388
AL PERREDISMO NACIONAL:

A LA CIUDADANÍA PATRIÓTICA Y DEMOCRÁTICA:

La elección del 16 de marzo para renovar instancias nacionales y estatales del PRD fue viciada por la disputa desbordada entre dos bloques de fuerzas y, 7 días después el proceso post-electoral está entrampado, configurando el riesgo más serio que ha tenido la unidad y viabilidad del principal referente político electoral de la izquierda mexicana.

-I-

Para sacar al PRD de la barranca, lo primero que se requiere es autocrítica de todas las fuerzas e instancias del partido.

Hay que salir de la dinámica de la descalificación y recriminación a los demás, asumir también la parte de responsabilidad que nos toca, y sobre todo, poner en primer plano la necesidad urgente de que todo el potencial perredista, se despliegue para fortalecer la lucha en defensa de los energéticos y por el derrumbe de la república simulada.

La dinámica de la descalificación y recriminación, convierte en antagónicas contradicciones en el seno del campo patriótico y democrático, que siendo importantes y no hay que soslayarlas, son secundarias en relación con la disputa contra las fuerzas neoliberales, más aún cuando estamos en la fase culminante del proceso de neocolonización de México, y de un retroceso autoritario que ya adquiere rasgos de nazipanismo.

Nosotros, la Red-IR, vimos venir la polarización de la disputa entre el bloque que apoyó a Jesús Ortega y el que apoyó a Encinas. Uno de los objetivos de nuestra campaña fue despolarizar. Asumimos que no fuimos capaces de lograrlo y, por ello, somos corresponsables de la situación de bancarrota que padece el modelo de partido perredista.

La Red-IR no fue capaz de evitar que la mayoría perredista inconforme y cuestionadora, se dispersara en dos segmentos: uno que considera que el problema principal es superar el papel de aparato de acompañamiento del PRD hacia el liderazgo en turno y su burbuja y que dio su apoyo a Ortega; otro que consideró que Nueva Izquierda es la principal responsable de la dinámica y de las decisiones burocráticas que predominan en el PRD, y canalizó su apoyo a Encinas.

La Red-IR no fuimos capaces, pues, de ganar al perredismo popular e inconforme con la dinámica y los métodos burocráticos que predominan en el partido, para que asumiera que el fortalecimiento de la tendencia de izquierda patriótica y revolucionaria, es el factor principal para superar la crisis de identidad ideológica del PRD, para ponerlo en movimiento y superar su alejamiento de la lucha social y política de masas, así como para reactivar la discusión y formación política que permita superar la empobrecida vida interna y el atraso a que se condena al perredismo.

En otras palabras, no fuimos capaces de que el perredismo inconforme y popular asumiera la principal lección que la crisis del PRD nos da: sin hegemonía de izquierda y revolucionaria, la lucha electoral e institucional conduce al movimiento de liberación patriótica y democrática de México, por un lado, a la impotencia para enfrentar fraudes y usurpaciones con la lucha de masas generalizada; por el otro, a la conformación y predominio de capas burocráticas que priorizan sus intereses y se pierden en disputas interminables de poder.

-II-

¿Qué propone la Red-IR para destrabar el atolladero a que nos condujo la elección interna?

Primero: ratificamos que la judicialización del proceso no es salida. Decidir ir al TRIFE para que resuelva qué bloque se queda con la presidencia y el registro, es el camino de la división del PRD.

Segundo: la salida es la del acuerdo político, que parta de asumir que el proceso está viciado y entrampado.

Tercero: que no se trata solamente de nombrar una dirección interina para reorganizar nuevas elecciones, sino de asumir que el modelo de partido está agotado… y que estas deben ser las últimas elecciones del PRD actual.

Cuarto: que por lo tanto, hay que definir una ruta para salir de la crisis institucional actual y cambiar el modelo de partido, por lo que se hace indispensable realizar a la mayor brevedad un cónclave con los principales actores: Andrés Manuel López Obrador, el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, los gobernadores y representantes de las principales fuerzas del partido, que discuta la situación y delinee un acuerdo y ruta política que se presente al Consejo Nacional, próximo a reunirse.

Quinto: la Red-IR insistirá que la salida al agotamiento del modelo de partido está en ir a la conformación de un Partido Frente Electoral Único del campo patriótico y democrático, semejante al Frente Amplio de Uruguay y/o el Partido Democrático Italiano.

Sexto: la Red-IR convoca a todas y todos los perredistas a salir del conflicto electoral interno y pasar inmediatamente a organizarse como brigadas en defensa de los energéticos y por el derrumbe de la república simulada.

México, D.F. a 24 de marzo de 2008

¡Por la izquierda que México necesita!

JOSÉ CAMILO VALENZUELA

SALIDA POLÍTICA O HABRÁ DIVISIÓN

AL PERREDISMO NACIONAL:

A LA CIUDADANÍA PATRIÓTICA Y DEMOCRÁTICA:

La elección del 16 de marzo para renovar instancias nacionales y estatales del PRD fue viciada por la disputa desbordada entre dos bloques de fuerzas y, 7 días después el proceso post-electoral está entrampado, configurando el riesgo más serio que ha tenido la unidad y viabilidad del principal referente político electoral de la izquierda mexicana.

-I-

Para sacar al PRD de la barranca, lo primero que se requiere es autocrítica de todas las fuerzas e instancias del partido.

Hay que salir de la dinámica de la descalificación y recriminación a los demás, asumir también la parte de responsabilidad que nos toca, y sobre todo, poner en primer plano la necesidad urgente de que todo el potencial perredista, se despliegue para fortalecer la lucha en defensa de los energéticos y por el derrumbe de la república simulada.

La dinámica de la descalificación y recriminación, convierte en antagónicas contradicciones en el seno del campo patriótico y democrático, que siendo importantes y no hay que soslayarlas, son secundarias en relación con la disputa contra las fuerzas neoliberales, más aún cuando estamos en la fase culminante del proceso de neocolonización de México, y de un retroceso autoritario que ya adquiere rasgos de nazipanismo.

Nosotros, la Red-IR, vimos venir la polarización de la disputa entre el bloque que apoyó a Jesús Ortega y el que apoyó a Encinas. Uno de los objetivos de nuestra campaña fue despolarizar. Asumimos que no fuimos capaces de lograrlo y, por ello, somos corresponsables de la situación de bancarrota que padece el modelo de partido perredista.

La Red-IR no fue capaz de evitar que la mayoría perredista inconforme y cuestionadora, se dispersara en dos segmentos: uno que considera que el problema principal es superar el papel de aparato de acompañamiento del PRD hacia el liderazgo en turno y su burbuja y que dio su apoyo a Ortega; otro que consideró que Nueva Izquierda es la principal responsable de la dinámica y de las decisiones burocráticas que predominan en el PRD, y canalizó su apoyo a Encinas.

La Red-IR no fuimos capaces, pues, de ganar al perredismo popular e inconforme con la dinámica y los métodos burocráticos que predominan en el partido, para que asumiera que el fortalecimiento de la tendencia de izquierda patriótica y revolucionaria, es el factor principal para superar la crisis de identidad ideológica del PRD, para ponerlo en movimiento y superar su alejamiento de la lucha social y política de masas, así como para reactivar la discusión y formación política que permita superar la empobrecida vida interna y el atraso a que se condena al perredismo.

En otras palabras, no fuimos capaces de que el perredismo inconforme y popular asumiera la principal lección que la crisis del PRD nos da: sin hegemonía de izquierda y revolucionaria, la lucha electoral e institucional conduce al movimiento de liberación patriótica y democrática de México, por un lado, a la impotencia para enfrentar fraudes y usurpaciones con la lucha de masas generalizada; por el otro, a la conformación y predominio de capas burocráticas que priorizan sus intereses y se pierden en disputas interminables de poder.

-II-

¿Qué propone la Red-IR para destrabar el atolladero a que nos condujo la elección interna?

Primero: ratificamos que la judicialización del proceso no es salida. Decidir ir al TRIFE para que resuelva qué bloque se queda con la presidencia y el registro, es el camino de la división del PRD.

Segundo: la salida es la del acuerdo político, que parta de asumir que el proceso está viciado y entrampado.

Tercero: que no se trata solamente de nombrar una dirección interina para reorganizar nuevas elecciones, sino de asumir que el modelo de partido está agotado… y que estas deben ser las últimas elecciones del PRD actual.

Cuarto: que por lo tanto, hay que definir una ruta para salir de la crisis institucional actual y cambiar el modelo de partido, por lo que se hace indispensable realizar a la mayor brevedad un cónclave con los principales actores: Andrés Manuel López Obrador, el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, los gobernadores y representantes de las principales fuerzas del partido, que discuta la situación y delinee un acuerdo y ruta política que se presente al Consejo Nacional, próximo a reunirse.

Quinto: la Red-IR insistirá que la salida al agotamiento del modelo de partido está en ir a la conformación de un Partido Frente Electoral Único del campo patriótico y democrático, semejante al Frente Amplio de Uruguay y/o el Partido Democrático Italiano.

Sexto: la Red-IR convoca a todas y todos los perredistas a salir del conflicto electoral interno y pasar inmediatamente a organizarse como brigadas en defensa de los energéticos y por el derrumbe de la república simulada.

México, D.F. a 24 de marzo de 2008

¡Por la izquierda que México necesita!

JOSÉ CAMILO VALENZUELA

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A LA CIUDADANÍA PATRIÓTICA Y DEMOCRÁTICA:


La elección del 16 de marzo para renovar instancias nacionales y estatales del PRD fue viciada por la disputa desbordada entre dos bloques de fuerzas y, 7 días después el proceso post-electoral está entrampado, configurando el riesgo más serio que ha tenido la unidad y viabilidad del principal referente político electoral de la izquierda mexicana.

-I-

Para sacar al PRD de la barranca, lo primero que se requiere es autocrítica de todas las fuerzas e instancias del partido.

Hay que salir de la dinámica de la descalificación y recriminación a los demás, asumir también la parte de responsabilidad que nos toca, y sobre todo, poner en primer plano la necesidad urgente de que todo el potencial perredista, se despliegue para fortalecer la lucha en defensa de los energéticos y por el derrumbe de la república simulada.

La dinámica de la descalificación y recriminación, convierte en antagónicas contradicciones en el seno del campo patriótico y democrático, que siendo importantes y no hay que soslayarlas, son secundarias en relación con la disputa contra las fuerzas neoliberales, más aún cuando estamos en la fase culminante del proceso de neocolonización de México, y de un retroceso autoritario que ya adquiere rasgos de nazipanismo.

Nosotros, la Red-IR, vimos venir la polarización de la disputa entre el bloque que apoyó a Jesús Ortega y el que apoyó a Encinas. Uno de los objetivos de nuestra campaña fue despolarizar. Asumimos que no fuimos capaces de lograrlo y, por ello, somos corresponsables de la situación de bancarrota que padece el modelo de partido perredista.

La Red-IR no fue capaz de evitar que la mayoría perredista inconforme y cuestionadora, se dispersara en dos segmentos: uno que considera que el problema principal es superar el papel de aparato de acompañamiento del PRD hacia el liderazgo en turno y su burbuja y que dio su apoyo a Ortega; otro que consideró que Nueva Izquierda es la principal responsable de la dinámica y de las decisiones burocráticas que predominan en el PRD, y canalizó su apoyo a Encinas.

La Red-IR no fuimos capaces, pues, de ganar al perredismo popular e inconforme con la dinámica y los métodos burocráticos que predominan en el partido, para que asumiera que el fortalecimiento de la tendencia de izquierda patriótica y revolucionaria, es el factor principal para superar la crisis de identidad ideológica del PRD, para ponerlo en movimiento y superar su alejamiento de la lucha social y política de masas, así como para reactivar la discusión y formación política que permita superar la empobrecida vida interna y el atraso a que se condena al perredismo.

En otras palabras, no fuimos capaces de que el perredismo inconforme y popular asumiera la principal lección que la crisis del PRD nos da: sin hegemonía de izquierda y revolucionaria, la lucha electoral e institucional conduce al movimiento de liberación patriótica y democrática de México, por un lado, a la impotencia para enfrentar fraudes y usurpaciones con la lucha de masas generalizada; por el otro, a la conformación y predominio de capas burocráticas que priorizan sus intereses y se pierden en disputas interminables de poder.

-II-

¿Qué propone la Red-IR para destrabar el atolladero a que nos condujo la elección interna?
Primero: ratificamos que la judicialización del proceso no es salida. Decidir ir al TRIFE para que resuelva qué bloque se queda con la presidencia y el registro, es el camino de la división del PRD.
Segundo: la salida es la del acuerdo político, que parta de asumir que el proceso está viciado y entrampado.

Tercero: que no se trata solamente de nombrar una dirección interina para reorganizar nuevas elecciones, sino de asumir que el modelo de partido está agotado… y que estas deben ser las últimas elecciones del PRD actual.

Cuarto: que por lo tanto, hay que definir una ruta para salir de la crisis institucional actual y cambiar el modelo de partido, por lo que se hace indispensable realizar a la mayor brevedad un cónclave con los principales actores: Andrés Manuel López Obrador, el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, los gobernadores y representantes de las principales fuerzas del partido, que discuta la situación y delinee un acuerdo y ruta política que se presente al Consejo Nacional, próximo a reunirse.

Quinto: la Red-IR insistirá que la salida al agotamiento del modelo de partido está en ir a la conformación de un Partido Frente Electoral Único del campo patriótico y democrático, semejante al Frente Amplio de Uruguay y/o el Partido Democrático Italiano.

Sexto: la Red-IR convoca a todas y todos los perredistas a salir del conflicto electoral interno y pasar inmediatamente a organizarse como brigadas en defensa de los energéticos y por el derrumbe de la república simulada.

México, D.F. a 24 de marzo de 2008

¡Por la izquierda que México necesita!

JOSÉ CAMILO VALENZUELA

TRABA LA "CULTURA PRIISTA" EL AVANCE PARTIDARIO: VALENZUELA

Jorge Octavio Ochoa
El Universal Sábado 15 de marzo de 2008
Ala luz de lo ocurrido en la contienda por la dirigencia nacional del PRD, Camilo Valenzuela —uno de los cinco aspirantes— admite ver en el partido un “poco de todo”, de los epítetos que se lanzaron los candidatos: “corrompido, antidemocrático, clientelar, faccioso, vertical y autoritario”.
Advierte, incluso, que fue un error de Andrés Manuel López Obrador apoyar a Alejandro Encinas, también candidato a la presidencia del sol azteca. Opinó que una cosa es manifestar una preferencia y otra es convertirse en su “manager y promotor”.
Más bien, considera que debiera de encabezar la construcción de la Convención Nacional Democrática (CND) de abajo para arriba, con democracia participativa y no seguir tratando al movimiento patriótico como “seguidores”.
En entrevista, Camilo Valenzuela asegura que en 2005 López Obrador se equivocó al imponer a Leonel Cota Montaño, “un hombre que no sabe nada de política de masas”, y que ahora nuevamente lo hace al promover a Encinas, “un hombre que desde hace mucho tiempo es como la espuma en la avena, siempre está arriba”.
En su opinión, el error de Andrés Manuel López Obrador se profundizó al utilizar al “gobierno legítimo” y a la CND para promover a un “designado”.
En marzo, en la plenaria de la Convención Nacional Democrática, López Obrador “mandó” a Encinas a presidirla, en obvia utilización de este espacio para la pugna interna del PRD, dijo.
Para Valenzuela, esto es parte de la “clásica cultura priísta que expresa el peso que ha adquirido en el perredismo y el obstáculo en que se ha convertido para el desarrollo del partido”.
Opina que el futuro de López Obrador como líder principal del movimiento patriótico y democrático depende de que cambie visiones y métodos de trabajo.
No lo ve como candidato en 2012, ya que por la gravedad de la situación nacional, esgrime, habría que plantearse una estrategia de liberación nacional de México.
“Si él persiste en esa visión que ve a la gente como seguidores y no como el poder popular que debe organizarse de abajo para arriba, con espacios para discutir y decidir las líneas, creo que su liderazgo se va a deteriorar y no va a potenciarse como lo requiere una disputa por la nación”, señala.
Sin embargo, no comparte la idea de convertir al Partido de la Revolución Democrática en la columna vertebral del Gobierno Legítimo, de la CND y del Frente Amplio Progresista.
Advierte la posibilidad de impugnar el proceso electoral del Partido de la Revolución Democrática del domingo. “No estamos en el plan de otorgar un cheque en blanco a nadie”.
“Después del proceso analizaremos, como expresión política, la posibilidad de impugnar”, señala con gesto adusto.
Asegura que tanto Jesús Ortega como Alejandro Encinas son corresponsables de la crisis que vive ese partido, del empobrecimiento extremo de la vida interna y el debilitamiento de su vida organizada.
La mayoría de los comités de base no existen, los municipales no funcionan. Los estatales y el nacional operan más como esferas operativas que como base de discusión y de trazo de línea política, comenta el veterano experto en movilizaciones sociales.
Dice que se está sobreestimando el peso de las cúpulas en el proceso y el nivel de inconformidad y transformación que ha crecido en el sol azteca.
Asevera que el Partido de la Revolución Democrática continúa siendo el principal referente político de izquierda mexicana.
http://www.eluniversal.com.mx/nacion/158216.html

LOPEZ OBRADOR CONTRIBUYE A CREAR INCERTIDUMBRE EN TORNO A LA ELECCIÓN INTERNA DEL PRD

- Asume el manejo de la campaña de Encinas: Valenzuela
- No judicializar el proceso implica aceptar ilegalidades


La intromisión de Andrés Manuel López Obrador en la contienda interna del Partido de la Revolución Democrática (PRD) al recomendar la candidatura de Alejandro Encinas y convertirse en promotor de su campaña política, contribuye a tensar el proceso y crear un ambiente de incertidumbre, contrario al de unidad y participación que se espera para el domingo 16 durante la elección.

Durante la conferencia de prensa que ofreció hoy, Camilo Valenzuela fue tajante: “lamento que en Andrés Manuel no haya prudencia” y siga empeñado en su error de apoyar abiertamente a Encinas, y seguro lo hace, porque sabe que su recomendado no tiene las características para por si solo obtener el triunfo y lograr el liderazgo e influencia que se necesita en la renovación del PRD. También deploró que use a la Convención Nacional Democrática para respaldarlo, ya que esa confluencia de organizaciones está por encima de partidos políticos y liderazgos.

En especial “me molesta que el presidente legítimo deje entrever que cualquiera de los candidatos que gane, a excepción de Encinas, sería visto con simpatía desde Los Pinos. En lo personal, me he mantenido y mantengo a la izquierda de las posiciones que asume Andrés Manuel. Por tanto, expreso que no merezco ser ubicado en esa categoría de gente proclive al gobierno usurpador. Nunca me he ufanado de tener amistad con personeros de las fuerzas que dominan el sistema, como sí lo hace Encinas”.

No obstante, el candidato a la presidencia nacional del PRD expuso que sacar adelante la elección con el menor número de incidentes y sin enfrentamientos verbales e inclusive físicos entre seguidores, requerirá una gran madurez y responsabilidad de todas las fuerzas internas del partido. Aunque hay que aceptar las dificultades y deficiencias que enfrenta: insuficientes debates, entrega demasiado tarde de propaganda, el poco tiempo que se tuvo para construir las instancias electorales, en especial las que van a instalar las casillas y coordinar la votación, un padrón poco confiable y el encono con tintes de guerra sucia entre simpatizantes.

A pesar del clima en que llegan a su fin las campañas políticas y el esfuerzo del Comité Ejecutivo Nacional para que candidatos, gobernadores y coordinadores parlamentarios asumieran el compromiso de cuidar la elección, Camilo Valenzuela afirmó que de su parte “no hay la intención de judicializar el resultado, porque no confiamos en las instancias oficiales encargadas de vigilar la legalidad político electoral”: Tribunal Federal Electoral, Instituto Federal Electoral y la subprocuraduría para Delitos Electorales de la PGR”.

Sin embargo, esto no implica que “vamos a permanecer callados y sin actuar frente a las ilegalidades que se lleguen a cometer”. Existe el recursos de la denuncia y acción política y de haber irregularidades que pongan en juicio la legitimidad del proceso, “nosotros vamos a actuar políticamente”, como lo exige la tendencia de la izquierda patriótica y revolucionaria.

Por último, Camilo Valenzuela condenó el comportamiento de algunos legisladores panístas y priístas hacia dos mujeres diputadas: Layda Sansores y Valentina Batres. Es lastimoso y grave que se les agreda con la consigna de “tubo, tubo” en la Cámara de Diputados. Ello, dijo, da idea del envilecimiento de las camarillas que han hundido en el descrédito a los Poderes de la Unión.